Tus amigos más cercanos saben lo que te hace reír y lo que te hace llorar. Han visto que una sonrisa aflora en tu cara y que estallas en risa. Han visto tu cara reflejando tristeza, y tal vez incluso hayan visto lágrimas. Tal como cada persona es única, la experiencia de cada persona también es única en su clase. Hay partes de nuestras experiencias que nos encantan, y otras partes que quisiéramos que pudiéramos borrar.
Así como un amigo íntimo se deleita al escuchar tu persona sin nada de edición y te hace sonreír, podemos perdernos de estas oportunidades en nuestro atiborrado ajetreo. Nuestra tendencia a comparar y enfocar lo que nos falta en lugar de la abundancia tampoco ayuda. La práctica de la gratitud cambia la atención de nuestra mente a las circunstancias que nos han sido dadas. La gratitud no arregla problemas ni niega las dificultades de la vida, pero sí abre nuestros ojos a las bendiciones. Por eso, llevar un diario donde podemos anotar las circunstancias y cosas por que dar gracias sigue siendo popular. ¡Pruébalo! El mismo acto de hacer una pausa, reflexionar, y darle espacio a nuestra gratitud, tanto en nuestra mente como en el papel, cambiará tu perspectiva y el paisaje de tus pensamientos. Éxitos!!!
Comments